
Y es que los toldos también son un aliado contra el mal tiempo. Vale que durante la época estival utilicemos los toldos en mayor medida para resguardarnos del sol, pero en invierno también cumplen su función. No todos los días estamos a temperaturas bajo cero, y hay más de un rato de sol en el que puedes disfrutar de tu jardín. Incluso cuando llueve y no hace mucho frío puedes tomarte un aperitivo al aire libre.
5 Ventajas de Tener un Toldo
✔️ Sombra Garantizada
Está claro que en verano son la clave para poder disfrutar al aire libre de los días de altas temperaturas y sol abrasador. También puedes resguardarte los días que sale un sol quemador en invierno. Ya sea en casa o en cualquiernegocio.
✔️ Adiós a la lluvia y al frío
Las frías temperaturas de invierno se ven suavizadas bajo una lona, notando un frío menos intenso. Por lo que podrás relajarte en tu jardín, eso sí, ¡bien abrigado si no quieres resfriarte! Además, los días de lluvia podrás ver llover sentado en una silla bajo el toldo sin mojarte. ¡Y en verano no te afectarán las tormentas! ¡Estarás a salvo de la lluvia!
✔️ Sin decoloración
Los toldos protegerán muebles, suelos o textiles de la decoloración que provocan los rayos de sol. Evitando así un envejecimiento prematuro de los objetos que tienes en casa.
✔️ Intimidad todo el año
Los toldos no solo te protegen del calor, de la lluvia o del frío. También de los vecinos curiosos que miran cómo desayunas o duermes la siesta.
✔️ Espacio añadido
Una terraza o jardín con toldo proporciona un espacio extra a la vivienda. Puede ser tu rincón para leer, descansar o tomar un aperitivo. En pantalones cortos en verano o con una manta en invierno, ¡lo importante es disfrutar de tu espacio!